Tiene apenas unos días que la CDMX, por las lluvias, estuvo a punto de quedarse sin ver a Billie Eilish.
Así como, por lo que, cuando los cielos comenzaron a nublarse en el segundo día del Festival Axe Cermonia, los asistentes se preocuparon.
Sin embargo, el clima cedió ante un segundo round que prometía el doble de energía, beats.
Además del baile, con un cartel encabezado por Rosalía, Julieta Venegas, M.I.A, Trueno, The Blaze y Jamie XX.
Pese a que para ese momento la lluvia parecía ya haber cesado, todo parecía indicar que se avecinaba otro tipo de movimiento natural.
Además de con la llegada de Rosalía, cuyo show pronosticaba un descontrol en los fans.
Y es que, pese a que no es la primera vez que se presenta en este festival y visitó la CDMX apenas el año pasado con su Motomami World Tour.
El cual no había quién quisiera perderse de su presentación y para una hora antes de su salida.
Así como del recinto ya estaba hasta su máxima capacidad.
A las 23:07 el rugir de una nota anunciaba que el momento había llegado y entre los parpadeos de múltiples reflectores.
El cual apareció un grupo de hombres/ con cascos, que al abrirse dieron paso a su motomami, Rosalía
La española apareció caminando lento como una felina y luciendo un vestido pegado de cuadros rojos con blanco.
Además de que combinó con medias y guantes negros, la cantante arrancó su show a ritmo de Saoku.
Dentro del tumulto sobresalían los miles de celulares para grabar sus interpretaciones de temas como Chicken Teriyaki y La Fama.
“No hace tanto que tuve la suerte de poder estar aquí y veo caras conocidas gracias a todos mis fans por estar aquí…
“Motomami, invítame a tu boda”, leyó de entre el público, mensaje que hacía referencia a su reciente compromiso con Rauw Alejandro.
“Qué más quisiera”, respondió en broma la artista.
Con su canción De aquí no sale, la artista de 30 años hizo lucir su voz con los juegos de armonías y melodías tradicionales de su tierra.
La española aprovechó esos temas para ofrecer también poderosos bailes flamencos que acompañada de bailarines la hacían adueñarse del escenario.
La cantante hizo una pequeña pausa cuando su cabello quedó enredado en el micrófono luego de tanto bailoteo.
Para seguir con su performance se dispuso a bajar del escenario con su público y con cámara en mano grabó a diversos fans.
Los cuales están entonando el éxito que sacó junto a Bad Bunny.
Además de que en esta ocasión serían ellos los encargados de hacerle segunda, algu